Trucos de limpieza Relimpiax:
¿Alguna vez habéis pensado en todos los elementos que nos rodean de cristal? El cristal es una parte vital de todo lo que utilizamos, ya sea para cocinar o servir alimentos, separar ambientes, cerramientos, ventanas o incluso las gafas con las que estás leyendo este artículo de hoy. Por ello requiere un cuidado especial a la hora de limpiarlo. Cómo hacerlo de una manera sencilla y duradera es algo que queremos compartir con vosotros: nuestros pequeños consejos y trucos de limpieza Relimpiax os permitirán que siempre luzca como el primer día.
Para limpiar el cristal se necesitan paños y detergentes suaves. Si vamos a limpiar vajilla y complementos de cristal debemos llenar el fregadero con agua tibia o caliente y agregar una pequeña cantidad de detergente, introduciendo en el mismo lo que queremos limpiar. Usaremos un paño suave para frotar la superficie y si el objeto a limpiar es muy pequeño: un cepillo de dientes. Después lo secaremos con un paño limpio y suave (es mejor secar que escurrir, para evitar rastro de gotas de agua)
Para que los vidrios de las ventanas y los espejos luzcan sin ráfagas ni restos de suciedad, usaremos paños suaves, toallas de papel, papel periódico, alcohol, vinagre y agua. Podemos hacer un limpiador de vidrios casero mezclando: una copa de alcohol, una taza de agua y una cucharada de vinagre, o bien una mezcla de partes iguales de vinagre y agua. Pulverizamos el limpiador sobre la superficie que queremos limpiar. Si la superficie tiene mucha suciedad, usaremos un paño suave humedecido con la mezcla, fregando de arriba hacia abajo para después, con un paño sin pelusa, terminar de secar. Repetiremos los pasos cuantas veces sea necesario para que el cristal quede totalmente limpio.
Esta mezcla de vinagre con agua, es una de las más populares y tradicionales para limpiar cristales y además resulta económica junto al uso del papel de periódico.
Los objetos de vidrio como jarrones, ceniceros o botellas podemos limpiarlos de una manera muy sencilla, tan solo debemos ayudarnos de un ingrediente en la cocina tan esencial como es el vinagre. En un barreño o sitio adecuado echaremos el vinagre y dejaremos los objetos sumergidos en el vinagre unos 20 ó 30 minutos. Es conveniente poner una bayeta en el fondo para que las piezas no se rompan al chocar. Después, con un cepillo, frotaremos suavemente para eliminar en profundidad las manchas. También podemos usarlo en el lavavajillas, añadiendo al lavado una taza o vaso de vinagre.
En el caso de los vasos, copas y jarras de cristal que quedan opacos por el uso, podremos disimular las manchas con una mezcla de agua con maicena, frotando con una gamuza suave. Esta bruma es el resultado de los residuos de jabón, depósitos minerales en el agua dura y del incorrecto secado al aire. Utiliza guantes de goma para evitar que tus huellas dactilares se impregnen en estas superficies de cristal.
Después, llena hasta la mitad tu fregadero con agua tibia y añade 2 cucharadas de un detergente suave para platos. Utiliza una botella de agua destilada si tienes agua dura, ya que ésta contiene minerales que pueden dejar depósitos en las copas de cristal, creando manchas más lechosas. También agrega 2 cucharadas de vinagre en el fregadero, ya que su acidez ayuda a descomponer las manchas de agua dura.
Deja que las copas absorban el limpiador durante la noche. Los limpiadores de cal y óxido pueden descomponer los residuos que se derivan del agua dura. Por la mañana limpia y lava las copas con agua y jabón y después sécalos con un paño sin pelusa.
Como último truco de hoy, diluiremos una cucharada de almidón en medio litro de agua caliente para quitar la grasa del cristal. Con una esponja iremos limpiándolo, dejando que seque y a continuación pasaremos de nuevo toda la superficie con un pliego de papel de periódico impregnado en vinagre de manzana. Esperamos que este fin de semana, aún lluvioso, os animéis a dejar vuestros cristales como nuevos. ¡Hasta nuevos trucos amigos Relimpiax!