Una vez más, os ofrecemos algunos de nuestros trucos de limpieza Relimpiax… En esta ocasión, queremos que saquéis de vuestros desvanes o armarios esas piezas de plata que guardasteis porque os robaba más tiempo su limpieza que su disfrute ¡Hoy es el día!
Es cierto que, actualmente, los objetos que se compran en plata, como marcos, relojes o bandejas, por ejemplo, vienen tratados para que ennegrezcan lo menos posible, suele tratarse de plata galvanizada con Rodio. Pero normalmente, es una realidad que la plata se oscurece con el paso del tiempo, dando como resultado una plata deslustrada (sobre todo en el caso de la antigua) Limpiar la se puede convertir en un trabajo odioso si no sabemos como organizar su limpieza…
Aquí os dejamos algunos consejos que os pueden ser de utilidad para ver lucir por más tiempo vuestras piezas de valor:
Aprovecha la vanguardia y mezcla esos objetos antiguos como cuberterías, juegos de tocador, bandejas, platos, ceniceros y adornos, portarretratos, incluso juegos de café o té para combinarlos con las líneas modernas. Todos estos objetos habrán oscurecido: el motivo no es la oxidación, como mucha gente piensa, en realidad la plata no se oxida sino que reacciona con el azufre o el sulfuro de hidrógeno y se vuelve negra a raíz de esa reacción.
Pero lo que más nos interesa es cómo limpiarla, ya sea con productos químicos comprados para ello o con “combinados” caseros:
Uno de los más conservadores consiste en forrar con papel aluminio el interior de un recipiente y llenar el recipiente con agua caliente en la que debes disolver una cantidad generosa de sal. Este método está bien para cubiertos y objetos pequeños.
Otra buena aliada es la mezcla de vinagre con bicarbonato de sodio, hay quien prefiere el limón. Con esta mezcla tienes que tener cuidado por la reacción que genera y sus vapores, ve mojando un paño en ambas cosas y frota suavemente la plata.
Puedes utilizar también pasta de dientes, antes lava el objeto con agua y jabón, después unta el dentífrico y frota intensamente con un paño, después vuélvelo a lavar con agua y jabón y sécalo con un paño de algodón.
Una forma rápida para sacar brillo, consiste en echar unas gotas de aguarrás sobre un algodón y frotar los objetos con él. Obviamente, después habrá que aclararlo.
Además de estos productos caseros como posible opción para limpiar nuestra plata, hay algunos otros detalles que debemos tener en cuenta:
Para frotar las zonas más complicadas, sobre todo en la plata labrada, puedes usar un cepillo de dientes suave o unos bastoncillos de algodón, ten cuidado con que no sea algo suave que pueda dañar la superficie.
No debes dejar residuos del producto con el que has limpiado la plata pues se manchará mucho antes.
Y para terminar, un par de consejos para ti…
Cuando estés limpiando plata, protege tus manos con guantes.
Haz la limpieza en una zona ventilada, pues los vapores que emite la plata al limpiarse, son perjudiciales para la salud.
¡Hasta pronto amigos Relimpiax!