Truco de limpieza Relimpiax:
Nos hemos encontrado más de una vez, con la difícil tarea de eliminar la grasa pegada de diversas superficies de la oficina, por lo que hoy, en los trucos de limpieza Relimpiax queremos hacer especial mención a esta difícil tarea.
Las manchas de grasa son el resultado del mal manejo de alimentos grasos y del uso de aceites de cocina. Al usar los distintos instrumentos de cocina, es casi inevitable que estas manchas aparezcan en las puertas, tiradores y cualquier cosa que se toque mientras se cocina.
No se trata sólo de los objetos que se tocan o del derrame para que las manchas aparezcan, sino también, partículas diminutas de aceite que se encuentran en el vapor de humo y que se elevan mientras se cocina. Quitar las manchas de grasa no es complicado, pero puede tomar su tiempo limpiarlas.
El proceso que os recomendamos para limpiar de manera eficiente la grasa de la cocina es el siguiente:
Llena un cubo con agua tibia. No necesitas agua hirviendo para eliminar la grasa, pero el agua fría es ineficaz para que el resultado sea lo mejor posible.
Añade un par de cucharadas de jabón líquido para platos, en el agua, o algún producto desengrasante del supermercado. Remueve el jabón en el agua hasta que se formen burbujas en la superficie.
Sumerge un paño suave en el agua jabonosa y luego escúrrelo. Comienza limpiando las manchas de grasa de la superficie de tus aparatos. Repetidamente sumerge y agita el trapo grasiento en el agua jabonosa con el fin de limpiarlo y poder utilizarlo de nuevo, repite esta acción varias veces para quitar las grasa de la superficie.
En el caso de que la suciedad o la grasa esté seca, utiliza un scortbrite o una nana (estropajo metálico) para arrancarlo lo mejor posible. Es importante que antes de ponernos a restregar esas zonas más secas, apliquemos el producto y esperemos un poco para que esté ablandado y sea más fácil eliminarlo.
Vierte el agua sucia por el desagüe. Lava el cubo con detergente y agua caliente. Vuelve a llenar el cubo con agua limpia y tibia. Sumerge otro paño limpio en el agua. Escurre y utilizalo para limpiar la superficie de antes y dejarla limpia. Repite esta acción varias veces hasta que en la superficie no queden resto de jabón.
Coge un paño seco para eliminar la humedad restante de la superficie. Cualquier grasa residual que pueda quedar estará tan diluida en este punto que el paño seco la recogerá enseguida.
También puedes ayudarte de productos o paños para pulir que harán recobrar el brillo a la superficie de tus muebles y electrodomésticos.
Con estos pasos no habrá grasa que se os resista, y para cualquier otra cosa, siempre podéis acudir a vuestra empresa de limpiezas favorita, Relimpiax.
¡Qué tengáis un muy buen fin de semana!